miércoles, 10 de agosto de 2011

LA MASACRE DE OSLO

La  masacre de Oslo es producto del odio,
la intolerancia, la xenofobia, el fascismo,
el racismo, el anti islamismo; el creernos una raza aria, 
superior, noble, gentil, nazista hitleriana, pura y sin mezcolanza étnica.
Odio generado por el solo hecho de pensar diferente, 
tener otra ideología, pensamiento, filosofía, religión, 
otra óptica de ver el mundo, formas de vida distintas.

Sin pensar que el origen de la evolución del hombre 
hace más de tres millones y medio de años,
comienza en el corazón de  África cuando los primates
se vieron obligados abandonar los árboles 
y andar erguidos por las sábanas del continente africano 
en busca de alimentos; y extenderse por todo el mundo 
a lo largo de los siglos, pasando por varios períodos evolutivos 
hasta llegar  al hombre moderno actual el homo sapiens 
de doscientos mil a cuarenta mil años de antiguedad  aproximada mente.

Todos sin excepción descendemos de nuestros ancestros africanos, 
primeros pobladores sobre la faz del planeta desde hace millones de años;
somos iguales ante los ojos de Dios nuestro creador y ante los hombres,
sin distingo de raza, credo, poder económico, político y social.

Si esto se cumpliera a cabalidad no hubiese ocurrido 
el holocausto judío durante la segunda guerra mundial, 
el genocidio en Corea, Vietnam, Irak y Afganistán, 
el exterminio del pueblo palestino y Libio, 
la crisis política y social desencadenada en Siria.

Y ahora recientemente en el país de los vikingos en el Reino de Noruega,
específicamente en la población de Oslo y en el centro de recreación en la isla de Utoya,
escenario de la más sangrienta masacre desde la segunda guerra mundial en ese país,
asesinando a personas inocentes por razones étnicas, fascistas y xenofóbicas,
a manos de un asesino extremista de ultra derecha lleno de odio hacia la humanidad.